El pescapeces de Tachán es un juego de mesa para participar en grupo, cuyo objetivo no es sólo la diversión sino el de mejorar aspectos de desarrollo y crecimiento en los niños.
El pescapeces se ha convertido en una forma divertidisima de diferenciar colores así como de mejorar la coordinación mano-ojo tan importante en el plano motriz de los niños en crecimiento; además de aspectos motrices, es un juego muy apto para practicar aspectos matemáticos como sumar, restar y asociar grupos de colores.
Además el juego permite el conocimiento de lo que suponen las reglas y los turnos del juego, del mismo modo que acercan a los niños a la tolerancia de la frustración o al crecimiento de la autoestima cuando pierden o ganan partidas.
Recomendado desde los 3 años.